Que en
el Arte la simbología es una de sus características más comunes y más
atractivas es bien conocido, si bien hay algunas más o menos conocidas que
otras y de un peso mayor. En el caso del autor que nos ocupa, el pintor
Renacentista Rafael Sanzio, incluyó una serie de detalles en sus pinturas que
han sido fuente de discusiones entre los entendidos y que han dado pie a largos
estudios.
En
algunos de sus lienzos o frescos colocó un dedo “extra” a alguna de las figuras
constituyentes de la obra. Estos personajes polidáctilos son muy sugerentes debido
a que los críticos de arte interpretaron durante años estos dedos
adicionales como un error artístico. Sin embargo, en el siglo XVI las personas
con seis dedos en sus manos o pies, según la tradición, poseían capacidades
especiales en la interpretación de sueños proféticos, algo así como un sexto
sentido.
Como ejemplos
se puede observar en las fotos “Los desposorios de la Virgen” en el cual San
José aparece representado con ese dedo extra en el pie izquierdo.
También
es curioso el detalle de la mano derecha de San Sixto (Sixto=seis) en el lienzo
“La Madonna Sixtina”, donde también se pueden apreciar esos seis dedos famosos.
Así
pues, y por reiteración se puede afirmar que Rafael sabía lo que hacía
perfectamente, y no era un error que se escapaba de entre sus dedos.